Quienes me inspiran a seguir

jueves, 3 de abril de 2014

Profundidad


Voy a contarte un cuento de como una estrella cayó profunda, profundamente en la oscuridad.

Voy a contarte la forma en la que ella cayó en la profundidad, sin quejarse y sin hacer ruido alguno, sólo dejándose arrastrar por las corrientes de un espacio que la aceptaba más de lo que ella misma se aceptaba.

Voy a contarte una historia que tal vez no tenga el final que esperas, pero que seguramente es el final que la pequeña estrella perdida necesita.

Ella viajó largo, largo tiempo antes de encontrar lo que había perdido, antes de encontrar lo que estaba buscando. Ella caminó y voló, ella se arrastró por el espacio dejando una estela de polvo a su paso, cada vez menos, menos y menos brillante.

Llegó un momento en el cual la pequeña estrella se detuvo, contemplando a su alrededor. Se encontraba sobre un agujero tan negro, tan negro que no podía saber dónde terminaría toda aquella profundidad. Y eso alegró su pensamiento pues sabía, en su pequeño, pequeño corazón, que el viaje valdría la pena. Que aquel nuevo viaje la llevaría tal vez no al lugar que quería, pero definitivamente al que necesitaba ir.

Nadie supo nunca si la pequeña, pequeña estrella en realidad se arrojó al vacío. Sólo se sabe que ella llegó sobre ese profundo, profundo agujero negro y que luego, todo explotó en miles de colores llenos de su propia extraña profundidad.

Y ahora estoy pensando en esa pequeña, pequeña estrella solitaria y herida, flotando sobre esta profunda, profunda oscuridad, preguntándome si ella tuvo tanto miedo como el que siento yo ahora...

No hay comentarios:

Publicar un comentario